Parado frente al mar oí una ola que me dijo: hola.
Eso no fue lo sorprendente, sino que me tratara como un igual.
Me encantó, pues desde entonces me siento ser uno con la inmensidad del mar.
Sí, ahí en ese centro se elaboran todos los sueños, la Naturaleza es la más bella oración al Único. Sólo ella puede encender al misterioso Corazón del Recuerdo Original.
Eso no fue lo sorprendente, sino que me tratara como un igual.
Me encantó, pues desde entonces me siento ser uno con la inmensidad del mar.
Sí, ahí en ese centro se elaboran todos los sueños, la Naturaleza es la más bella oración al Único. Sólo ella puede encender al misterioso Corazón del Recuerdo Original.
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