LA VERDAD NOMBRADA
La Verdad nombrada como Verbo
o como Fuego Divino,
es la definición fiel
de aquellas combinaciones Alegóricas
de La Creación,
que tienen su Origen
en antes del Universo,
en antes de La Existencia,
en antes del Repliegue
de los Dioses Menores de La Luz
Creada.
El Espíritu Santo es Santo
porque en su Acción
sobre estos Reinos de La Naturaleza
no está contaminado en absoluto
con elementos del Tiempo,
ni del Espacio,
ni de la Luz,
ni de la Forma.
Por esos vórtices extra-universales,
por esos canales ocultos para el
tiempo,
por el Otro Espacio,
llegó CRISTO,
trayendo consigo El Agua Increada,
que es como un Fuego Helado,
y que todo lo Transfigura.
Donde no te mejora,
sino que te cambia para siempre
y te lanza a La Eternidad,
y ya estás en todas partes
y en ninguna,
más allá de la Luz
y de las tinieblas del Tiempo,
en el Otro Espacio,
sin un adentro ni un afuera,
en La Verdad Increada de ese Dios
Incognoscible
para la Materia y su Evolución.
Más allá de esta realidad ilusoria.
Donde eres absolutamente
transparente,
donde eres libre e inmortal.
Donde ya nadie podría dañarte,
porque no tienes nada que perder,
porque has sabido
romper las cadenas causales que no
elegiste,
porque gracias a la Verdad Increada
ya sabes que tu lo estabas soñando
todo,
y ahora eres dueño de tus sueños,
y de tu espíritu,
y has despertado a ese Fuego
que nada puede detener,
es como un viaje infinito
hacia el centro
de un círculo inexistente: EL
SI MISMO.
LA PREGUNTA - VÍDEO
Hay una turquesa
que habita en el fondo del mar,
está en el centro
de las estrellas
y desprende una música
que lleva su nombre, y es
nombre de mujer, la más
antigua,
le canta a la esmeralda
caída del cielo.
AL OTRO DÍA DEL AMANECER
"El conocimiento de uno mismo es el único camino no
ilusorio hacia la Verdad."
Y la luz era diferente,
parecía surgir
del centro mismo de las cosas,
sus sombras eran altamente significativas,
expresaban el reposo del ser de los objetos,
y las cosas mismas
parecían saber que habitaban
en el espacio libre del universo,
no ya en la ciudad,
todo era fantásticamente espacial,
todo era fantásticamente espacial,
pero con sabor a oxígeno,
y hasta el viento se movía
como un gran pensamiento buscando algo
que había perdido
en el mundo de los sueños,
habitar en esa inmensidad
fue descubrir
la plenitud de la existencia en cada detalle.
El Espíritu de lo Alto
me había devuelto el cuerpo y por lo tanto
mi espíritu
estaba repleto de esa luz,
como si el tiempo
hubiera sido arrancado de golpe
de la faz de la Tierra,
desde entonces no miro otra cosa,
porque veo venir
una música verde azulada posarse en el
horizonte de esta humanidad.
oh! sinfonía de la luz
en las pupilas de la noche,
¿dónde estás
que ya no oigo venir tu melodía?
Te siento venir
por todos los espacios,
por los bordes del infinito
ascendente,
desde un centro impreciso
que está en todas partes.
Oh! soberana
abre tu boca y ¡sácalos de ahí!,
antes que se mueran del todo,
derrama tu cántaro
sobre los vivos y los muertos
antes que despierten y mueran
despedazados.
EL PEDIDO
En lo más profundo
de la noche toda,
nace esa flor blanca, la del pedido,
siendo simiente la oración sacra,
la que es capaz en su soledad,
de rasgar los velos del tiempo,
cruzando esos anillos, llegando a
Dios,
pegando un salto mortal en la noche,
experimentando sus viejas artes,
con una memoria terrible,
y una humildad que se deshace,
la belleza reina en el valle...
como vestida de novia
pero con las manos ensangrentadas,
con sangre del sacrificio,
con la sombra de la misericordia,
con el amor hecho pedazos,
con la sangre de los esclavos
eleva su corazón en comunión con la
Luz,
hasta perderse en el espíritu,
imaginándolo todo por última vez.
Naciendo ese jazmín de la Atlántida.
EN ESTE INSTANTE
Sintonizarnos
es como ascender
por el vértigo del reencuentro,
algo milenario que se hace instante,
oh! sinfonía de la luz
en las pupilas de la noche,
¿dónde estás
que ya no oigo venir tu melodía?
Te siento venir
por todos los espacios,
por los bordes del infinito
ascendente,
desde un centro impreciso
que está en todas partes.
Oh! soberana
abre tu boca y ¡sácalos de ahí!,
antes que se mueran del todo,
derrama tu cántaro
sobre los vivos y los muertos
antes que despierten y mueran
despedazados.
REENCUENTRO
Hay un vértigo desde el Espíritu al
cuerpo.
Hay una nostalgia esencial desde el cuerpo hacia el Espíritu.
Hay un aullido que se enlaza con la oración sacra.
Hay templos monumentales que anuncian lo infinito.
Hay una procesión de sombras silenciosas cruzando la historia y las obras.
Hay monjes disfrazados de sombras que conocen el gran secreto.
Yo los he desenmascarado en esas tabernas casi derrumbadas de estos tiempos y en mi ciudad.
Hay órdenes misteriosas que se desenvuelven casi debajo de los mostradores y los poetas del silencio.
Hay cascadas de Luz detrás de las formas del tiempo.
¿Acaso yo conozco a los desconocidos de siempre?
¿Acaso hay una Orden misteriosa en ese ámbito entre el Espíritu y el cuerpo?
¿Qué es el Alma?
¿Dónde queda el Círculo?
¿Y la Ciudad?
¿O la verticalidad del silencio?
A esta Escuela sin tiempo ni espacio no se puede entrar sin el Espíritu o sin el cuerpo, y muchísimo menos sin el Alma.
El plano intermedio entre el Espíritu y el cuerpo lo da el Reencuentro con la mujer.
Sin la imagen al menos de ella no es posible la entrada a esta Orden sin tiempo ni espacio.
Orden de sabios, de poetas, de guerreros de todos los tiempos, de héroes y heroínas, de artesanos y orfebres del templo, de santos activos, de custodios de la luz, de Magos.
La salida es por el no aislamiento profundo y abismal, alquímico y religioso de alta Tonalidad Esencial, eterna, intemporal como en aquellas edades ya olvidadas...
Vertical como un suspiro de la luz, como un encuentro imposible que se torna posible, sin fórmulas conocidas, porque es eterno.
Es cuando hay un buen silencio tenso y pleno.
La tensión del Espíritu y su norte es imprescindible para mantener la bipolaridad necesaria para la formación del Centro Creador.
La verdad es un acto de recreación para los que sirven al único fin posible, porque saben que son diferentes, porque saben lo que está prohibido saber, porque tienen un destino al margen del tiempo y lo eterno auto-iluminándose.
Y todo esto en sincronicidad y justicia vertical.
Ya es hora de que hable del verdadero cambio Total.
Sin un adentro ni un afuera que obstruya esta intensidad de los tiempos de alegría y luz, de pan y espíritu, porque habrá un quehacer para los que dicen tener destino, de lo contrario no habrá tiempo sin tiempo para los mentirosos de la postergación y el sueño.
Hay una nostalgia esencial desde el cuerpo hacia el Espíritu.
Hay un aullido que se enlaza con la oración sacra.
Hay templos monumentales que anuncian lo infinito.
Hay una procesión de sombras silenciosas cruzando la historia y las obras.
Hay monjes disfrazados de sombras que conocen el gran secreto.
Yo los he desenmascarado en esas tabernas casi derrumbadas de estos tiempos y en mi ciudad.
Hay órdenes misteriosas que se desenvuelven casi debajo de los mostradores y los poetas del silencio.
Hay cascadas de Luz detrás de las formas del tiempo.
¿Acaso yo conozco a los desconocidos de siempre?
¿Acaso hay una Orden misteriosa en ese ámbito entre el Espíritu y el cuerpo?
¿Qué es el Alma?
¿Dónde queda el Círculo?
¿Y la Ciudad?
¿O la verticalidad del silencio?
A esta Escuela sin tiempo ni espacio no se puede entrar sin el Espíritu o sin el cuerpo, y muchísimo menos sin el Alma.
El plano intermedio entre el Espíritu y el cuerpo lo da el Reencuentro con la mujer.
Sin la imagen al menos de ella no es posible la entrada a esta Orden sin tiempo ni espacio.
Orden de sabios, de poetas, de guerreros de todos los tiempos, de héroes y heroínas, de artesanos y orfebres del templo, de santos activos, de custodios de la luz, de Magos.
La salida es por el no aislamiento profundo y abismal, alquímico y religioso de alta Tonalidad Esencial, eterna, intemporal como en aquellas edades ya olvidadas...
Vertical como un suspiro de la luz, como un encuentro imposible que se torna posible, sin fórmulas conocidas, porque es eterno.
Es cuando hay un buen silencio tenso y pleno.
La tensión del Espíritu y su norte es imprescindible para mantener la bipolaridad necesaria para la formación del Centro Creador.
La verdad es un acto de recreación para los que sirven al único fin posible, porque saben que son diferentes, porque saben lo que está prohibido saber, porque tienen un destino al margen del tiempo y lo eterno auto-iluminándose.
Y todo esto en sincronicidad y justicia vertical.
Ya es hora de que hable del verdadero cambio Total.
Sin un adentro ni un afuera que obstruya esta intensidad de los tiempos de alegría y luz, de pan y espíritu, porque habrá un quehacer para los que dicen tener destino, de lo contrario no habrá tiempo sin tiempo para los mentirosos de la postergación y el sueño.
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